Hay un dicho muy conocido “El casado, casa quiere”, pero en las últimas décadas no solo los casados desean una casa propia, los solteros también la anhelan. Es un deseo que no distingue edad, condición social, ni género. Algunos sueñan con una gran casa otros con un departamento.
Sentada frente a la laptop, con los ojos cansados, quejándome de estar más de 8 horas mirándola fijamente de lunes a domingo y el cuello adolorido del estrés espero la llegada de mi delivery, una deliciosa comida para mí y mi familia.
Parte de pertenecer a una economía abierta implica tener actividad económica con los residentes del exterior, comerciar bienes y servicios con personas y negocios de la comunidad internacional. Es así como nacen los Tratados de Libre Comercio (TLC).